Una de granitos...

Cada granito de arena es clave cuando queremos levantar una montaña, no podríamos hacerlo sin todos y cada uno de ellos. Así mismo, los granitos de arroz juegan un papel fundamental para millones de seres humanos, teniendo en cuenta que el arroz es el alimento básico de 17 países de Asia y del Pacífico. También hay granitos que adquieren un alto grado de protagonismo, molesto en este caso, sobre todo si se sitúan en el trasero de una persona o de un gobierno municipal.

Así es la juventud rebelde y así es el vecindario consciente de Arganzuela. Un granito pequeño pero clave, de importancia vital para la vida del barrio y... para las autoridades, un granito molesto.

No se entendería de otra forma el hecho de que los responsables políticos y de la policía del ditrito hayan puesto el grito en el cielo despues de lo ocurrido el viernes 12 de septiembre en las Fiestas de la Melonera. Yendo al grano (al granito), resulta que la Coordinadora en Denfensa de los Servicios Públicos de Arganzuela organizó un pasacalles por la educación pública, que recorrió el Parque de Arganzuela con una alegre batucada y cánticos de “fuera las empresas de la educación”. Todo marchó sobre ruedas.

Pero, sorpresas de la vida, dos días después la policía del distrito asaltó a varios integrantes de la Coordinadora y además de identificarles les prohibió repartir octavillas. No sólo eso, los ejemplares de la edición especial de septiembre de El Altavoz de Legazpi que portaban algunos jóvenes fueron confiscados alegándose que contenían “propaganda del CSO La Casika y de CNT”... Vaya, tendremos que suponer que estos grupos son auténticos granitos de pus porque además de contar con el apoyo de mucha gente, desde luego no son ni ilegales ni sabíamos que repartir convocatorias suyas era motivo de persecución política.

Lo que sí sabemos es que responsables locales del PP, con mayoría absoluta en la Junta Municipal de Arganzuela y con una facilona vena hinchable, empezaron a difundir la pregunta por canales extrainstitucionales: ¿¿quién ha sido el de la batucada??

Ups, parece que alguien ha metido la pata... ¡por una batucada! ¿No será que quieren evitar que en Arganzuela el granito se convierta en tumor?

Boletín informativo y crítico editado por el CSO La Traba, octubre 2008
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