¡OTAN no, Bases fuera!: Madrid se rebela contra genocidio y guerrerismo


"Un primer paso para dar respuesta al disparate guerrerista"
La movilización, convocada por la Asamblea de Madrid contra el Rearme y la Militarización, integrada por unos 75 colectivos entre asociaciones, partidos políticos y sindicatos, busca revivir el espíritu antibelicista de 2003 y de la oposición a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) de 1986, en un contexto de escalada militar global.
Otra de las consignas reinantes durante la marcha fue la idea de que los rearmes y la militarización solo conducen a "guerras y genocidios bestiales como el de Palestina". Así lo piensa el periodista Iñaki Arduy, para quien el dinero de los presupuestos militares debería dedicarse "a fines sociales", manifestó a Sputnik.La marcha, que comenzó en la glorieta de Atocha, concluyó en la céntrica Puerta del Sol con la lectura de un manifiesto a cargo de Javier Baeza, párroco de la iglesia de San Carlos Borromeo de Madrid, que denunció el peligro de la "militarización de la sociedad y la economía".
La manifestación ocurrió en un contexto dominado de fondo por la próxima cumbre de la OTAN en La Haya, donde el imperialismo de EEUU presionará a todos los miembros para suscribir un aumento de los presupuestos nacionales en defensa al 5% del PIB. Las formaciones que integran Sumar, el socio del 'socialista' Pedro Sánchez en el Gobierno de coalición, se oponen al incremento de gasto. Mientras que partidos como el opositor Podemos pretenden, tímidamente. "corregir el rumbo del Gobierno de la guerra".
La protesta en Madrid es "fruto de la preocupación y el enfado que provoca en amplios sectores la deriva belicista en la que se han embarcado los dirigentes de la UE y los gobiernos, tratando de arrastrar a los pueblos del continente en ella", explica el portavoz de la Asamblea Contra el Rearme y la Militarización, que confirma que su organización ya está valorando otras iniciativas para "dar respuesta" a la próxima cumbre de la OTAN.
Bajo el lema “Contra el Rearme y la Militarización”, al menos 10.000 manifestantes recorrieron el sábado el centro de la capital española para rechazar el llamado desde la OTAN para incrementar el gasto militar hasta el 5 % del producto interior bruto (PIB), a expensas de los derechos sociales y la sanidad. Actualmente, España ha comprometido el 2 % del PIB hasta el 2029.
“¡No al Rearme, no a la guerra!”, “¡No son progresistas, son imperialistas!”, “¡OTAN no, Bases fuera!” y “¡Donde están, no se ven, las sanciones a Israel!”, son algunos de los lemas coreados por los manifestantes.
De hecho, la asamblea antimilitarista rechazó en su manifiesto “la espiral belicista impulsada desde las instituciones y los medios de comunicación” para infundir miedo y que una sociedad que se opone mayoritariamente a la “guerra imperialista acabe asumiéndola”.
Teresa Blázquez, de la Coordinadora de Madrid por la Defensa del Sistema Público de Pensiones, denunció que “el dinero para el rearme hay que usarlo para sanidad, educación, pensiones. Estamos en contra de que se gaste más dinero para la guerra”.
Dirigentes políticos de izquierda también se sumaron a la movilización. La líder de Podemos, Ione Belarra, y la eurodiputada Irene Montero advirtieron que “este plan de rearme es un robo a la ciudadanía” y que ya está generando recortes sociales, con “mil millones (de euros) menos para educación”.
“Seremos insumisas frente al rearme al servicio de Donald Trump y la complicidad con el genocidio en Palestina”, enfatizó Montero.
La manifestación también fue un espacio para exigir “que se paralice el genocidio en Palestina” y la apertura del paso de Rafah (sur de Gaza que comunica con Egipto) para la ayuda humanitaria. La activista Almudena Izquierdo, de Mujeres de Negro contra las Guerras, resaltó que España podría hacer más al respecto.
En la declaración, los manifestantes también denunciaron el genocidio israelí en los territorios palestinos, donde se han producido bombardeos sobre infraestructuras civiles como escuelas, hospitales o campos de refugiados, además de ataques que han causado el asesinato de muchas periodistas, personal sanitario y trabajadores de Naciones Unidas. Desde el 7 de octubre, Israel ha matado a más de 54 700 palestinos.