Guerra Nacional Revolucionaria en La Cabrera (Madrid)
10 días después, pasaría la guerra en camión y a pie. El 19 de Julio la agrupación local de Unión Republicana organiza una milicia local y se dirige al frente de Buitrago y ayuda a detener a las unidades golpistas del Coronel Mola. Por la noche segadores y hortelanos dejan la hoz y la azada por el fusil y la bala y levantan puesto de control en la carretera de Francia según el diario La Libertad del 9 de Septiembre de 1936. En esta localidad se establece un primer hospital de campaña para los heridos del frente.
22 de Julio de 1936 es asesinado por supuestos milicianos Ángel giel López, a la altura de la Gasolinera del municipio. En un incidente sin aclarar, ya que este había matado momentos antes a Gabriel Blamo. Los dos de Madrid, se estima una discusión personal como desencadenante de los hechos. . Ese día llega a la Cabrera Rosario la Dinamitera con un convoy de militantes de la JSU armados. En donde un mes más tarde seria ingresada por heridas producidas en la mano por una granada casera. Por La Cabrera también paso el filósofo Ortega y Gasset de visita en el hospital que albergaba a Rosario Sánchez Mora, a la que saluda.
En Octubre de 1936, la Junta de Beneficencia del distrito centro de Madrid, envía a La Cabrera 871 prendas de abrigo y cinco cajas de coñac. En donde se ubican la columna Galán. Benito Yagüe moñino muere el 12 de Noviembre de 1936. Se sospecho de una cuestión personal y no política de su fallecimiento. El supuesto responsable un destinado en Lozoyuela, Enrique del Ojo. De Madrid los dos, victima y agresor.
Batallones de fortificaciones se establecen en Diciembre de 1936 en La Cabrera, pertenecientes a la UGT. Estas brigadas de blindaje de la zona, son las que asaltan la iglesia y destruyen los altares de la misma, que los usan para material de construcción y desmontan las campanas para fundirlas. Lo que no era útil para la cuestión de defensa militar se quema en la puerta de la Iglesia. La madera es para calentarse y para uso de cocina, que está al mando del capitán Collar.
En ello contribuyen los vecinos Alfonso Rodríguez Pepín y Celso Villar alias el “gallego”. Este último solo trabajaba en el Hotel de Luis Fernández Elorza. No era originario de la localidad. La casa del cura es municipalizada por el ayuntamiento, que gobernaba Unión Republicana. Días más tarde la ocupa la UGT local por su propia cuenta. De la que es secretario General en el pueblo Antonio Bauza Loeches. Que se alterna en el cargo con Benigno Martín Cerezo. Se crea una comisión de abastos para los habitantes de La Cabrera. El cura de aquella época era D. Simón Antón Escrivá, al que no le sucede situación trágica alguna.
Destacados del Frente Popular en La Cabrera y de origen socialista son Luciano Cortes Soriano, Julián Loeches Cerezo y Julio Cortes Granados, Los hotelitos que tiene la municipalidad son tomados por las milicias que se establecen en el frente. Uno de los Hoteles el de Eduardo Giménez Sotillo. Se quema por el tejado por una mala combustión por la cocina. Al cacique local Cristo Peinado Martin se le requisa una camioneta de su propiedad. Este individuo vivía en la Calle de la Iglesia numero 6. La Sociedad Obrera de la UGT la integraban también Felipe Bauza Loeches y Manuel Rodríguez alias “Manolín”. Como curiosidad el destino de la furgoneta es el regimiento de trasmisiones del Ejército Popular de la República afincado en el municipio. Durante 1937 existió una escuela de formación de Carabineros en la localidad. En La Cabrera en Julio de ese año está asentada una sección de la Cruz Roja, con una sección anti-Gas por si se da un posible ataque fascista con armas químicas.
El 29 de Marzo de 1938 los sanitarios del Hospital militar de la Cabrera, envían una adhesión al Gobierno de Juan Negrín. Resistir es vencer.
A primeras horas del día 29 de Marzo de 1939, las tropas fascistas entran sin resistencia en el pueblo de La Cabrera. El conflicto bélico acaba, comienza la represión política y social.
El primer Alcalde Franquista de FET-JONS es Rafael Pietro. La democracia desaparece, se impone la dictadura.
* Eduardo Andradas es Investigador Histórico