Cañada Real: 27 días sin luz, una vida de dignidad
El sector 6 de Cañada Real, el más amplio y poblado de todos, el cual está entre los municipios de Madrid y Getafe, lleva cerca de un mes sin luz, cerca de un mes de comida congelada echada a perder, de niños que no pueden hacer los deberes porque no pueden acceder a sus ejercicios (que recordemos que el Ministerio de Educación impuso a los centros educativos hacerlos por vía online a través de distintas plataformas), un mes donde los vecinos no han podido acceder a las medidas de prevención y protección ante la crisis sanitaria provocada por la COVID 19. Desde hace una semana los vecinos del sector 5 (perteneciente al municipio de Rivas Vaciamadrid) se han sumado a esta problemática. Hoy sus vecinos se han sumado a las movilizaciones y reivindicaciones exigiendo un derecho básico que como rezaban los cánticos: no es un lujo, es un derecho. “Cañada unida, jamás será vencida”, “Sin solución habrá revolución”, “la lucha sigue, cueste lo que cueste” atronaban por los aledaños de la vía de trashumancia, haciendo que los vecinos se fueran sumando a la movilización.
Porque la luz de Cañada Real pertenece a Naturgy, empresa que tiene unos beneficios netos en el 2019 de 1.401 millones de euros. Los cuales salen de la explotación de un recurso que según la carta de los derechos del hombre y el ciudadano recoge como derecho universal para la dignidad de las personas.
Cerca de un centenar de mujeres y hombres se han juntado hoy desde la rotonda donde inicia el sector 6 cercano a la A3 y han marchado gritando, organizados, frente a un clima totalmente adverso y los más de 50 miembros de la policía tanto en lecheras como a caballo, han exigido una respuesta a las instituciones, ¿Por qué a menos de 15 km de la puerta del Sol, no son considerados ciudadanos? ¿Por qué su dignidad es menor a la de otras personas de barrios de Madrid?.
Hoy, los vecinos de Cañada Real han vuelto a dar un ejemplo de solidaridad, de organización y de lucha, y hoy siguen durmiendo sin luz y sin calor, pero con el orgullo y la dignidad de los que luchan.