lahaine.org
Madrid :: 16/11/2009

Arganzuela, distrito rebelde

El Altavoz de Legazpi
Podríamos decir que en Arganzuela vivimos un ?proceso de acumulación de fuerzas?

La concentración junto al ambulatorio de Pontones del pasado 5 de noviembre mostró la rabia de usuarios y profesionales del centro de salud ante el proceso de privativación de la sanidad que se vive en la Comunidad de Madrid y en particular en Arganzuela.

Este hecho es uno más que se suma a las muchas e importantes movilizaciones que en los últimos dos años han tenido lugar en el distrito: manifestación contra el el Día de la Hispanidad y por la convivencia intercultural en octubre de 2007, actos y manifestaciones antifascistas y antirracistas con motivo del asesinato de Carlos Palomino entre 2007 y 2009, marcha por la educación pública y por la construcción de un instituto en el barrio de Delicias-Legazpi en junio de 2009, concentraciones frente al ambulatorio de Pontones en 2008 y 2009, manifestación por la okupación en 2009... Así como otras movilizaciones que han pasado por Arganzuela como las marchas contra la Ley de Extranjería que tanto en 2008 como en 2009 han recorrido el Paseo de las Delicias.

Se han generado espacios de lucha organizados como la Coordinadora en Defensa de los Servicios Públicos de Arganzuela, el colectivo de jóvenes Arganzuela Insurgente o el Centro Social Okupado La Traba, además de verse aumentar la actividad reivindicativa de varias AMPAs (Miguel de Unamuno, Juan de la Cierva y Tirso de Molina) y otras asociaciones.

Podríamos decir que en Arganzuela vivimos un “proceso de acumulación de fuerzas”, es decir, un momento en el que se están dando pasos para regenerar el tejido social rebelde. Los núcleos de vecinos concienciados están acercándose unos a otros para sumar voluntades y organizarse, abandonando su aislamiento particular.

Esto está ocurriendo al margen de los grandes partidos y estructuras institucionales. Está ocurriendo desde la base, desde la humildad y el orgullo que contiene el trabajo social y político a pie de calle en el barrio. El proceso es duro y largo porque a los pastores mandamases no les gusta que las ovejas se salgan del rebaño.

Podemos estar satisfechos de que en Arganzuela las ovejas negras están aumentando en número y en capacidad organizativa. Pero aún estamos recorriendo el desierto y nos queda un largo trecho hasta ver la playa.

 

Este sitio web utiliza 'cookies'. Si continúas navegando estás dando tu consentimiento para la aceptación de las mencionadas 'cookies' y la aceptación de nuestra política de 'cookies'.
o

La Haine - Proyecto de desobediencia informativa, acción directa y revolución social

::  [ Acerca de La Haine ]    [ Nota legal ]    Creative Commons License ::

Principal