"Condenamos al Estado Español en Madrid por sus crímenes contra los pueblos"

En el marco de la campaña de solidaridad con Askapena, el 25 de septiembre tuvo lugar en Madrid el juicio popular contra el Estado Español, organizado por LIBRE-Madrid con el apoyo de numerosas organizaciones. El acto comenzó con retraso debido a que la policía decidió comenzar a identificar arbitrariamente a varias personas que asistían al mismo.

Tras una presentación en la que se recordó a los últimos 5 asesinados por el franquismo hace 40 años y se habló de la motivación del acto -el proceso judicial contra Askapena que pretende ilegalizar la organización y encarcelar a 5 de sus militantes- y del resto de actividades similares que se están celebrando durante estas semanas en Euskal Herria, en toda Europa y hasta en otros continentes, se dio paso a 15 intervenciones que sirvieron como testimonio de los crímenes del Estado Español y las vulneraciónes de derechos que cometió y comete contra los pueblos.

En primer lugar intervino el representante de la Coordinadora de Solidaridad con Cuba, que acusó al Estado por los crímenes cometidos tras el proceso de conquista y saqueo de América Latina. Después, una activista de la Plataforma Bolivariana habló la actual política en el mismo continente, basada en promover el golpismo, así como la actitud neocolonial del estado. A continuación tomó la palabra una activista saharaui que denunció la responsabilidad directa del estado en la situación colonial del Sahara Occidental. En nombre de la campaña BDS, un activista señaló la absoluta complicidad del Estado con Israel en su política genocida contra el pueblo palestino. Siguiendo con la denuncia del imperialismo, la representante del Foro contra la guerra imperialista y la OTAN denunció la política ingerencista y belicista contra la soberanía de los pueblos para apropiarse de sus recursos e instalar gobiernos serviles. Fue entonces el turno de los representantes de La Comuna y del Foro de la Memoria, que denunciaron la continuidad del régimen borbónico con la dictadura y la impunidad de los crímenes franquistas. Les siguió una joven de Yesca que denunció la conculcación del derecho de autodeterminación de los pueblos sometidos por el Estado. Las leyes que recortan derechos civiles y los abusos policiales fueron criticados por un abogado y activista que denunció el progresivo aumento de la represión contra el movimiento popular.
Una militante feminista de la Brigada 13 de noviembre dio voz a la denuncia del patriarcado estructural apuntalado por el estado, la complicidad con el feminicidio y los continuos ataques contra los derechos de las mujeres. A continuación fue señalada -por parte de un activista marroquí de Vía Democrática- la política racista del estado en relación a la inmigración, como se está comprobando estos mismos días en la cuestión de las personas refugiadas.

Un activista de Red Roja intervino a continuación para denunciar los tratados europeos firmados por el estado en el marco de la UE al servicio de la oligarquía, y fue seguido por la intervención de un representante da la Plataforma por la Remunicipalización de los Servicios Públicos, que criticó la política de austeridad y privatizaciones, y del sindicato AST, que denunció las política antiobrera llevada a cabo por los sucesivos gobiernos.El testimonio final fue, por supuesto, el de un representante de Askapena, Walter Wendelin, a quien el Estado pretende imponer 6 años de cárcel por su militancia internacionalista. En su intervención denunció el proceso contra ellos enmarcándolo en la estrategia represiva contra el pueblo vasco y su firme voluntad de no someterse y de continuar activamente con su trabajo solidario.

Todos estos testimonios justificaron la sentencia popular que se leyó para finalizar el acto, en el que se condena al Estado Imperialista Español por sus crímenes contra los pueblos y se señala su falta de legitimidad para juzgar a militantes y activistas, y en particular el trabajo internacionalista de Askapena.

Desde LIBRE-Madrid, con la convicción de que esta sentencia simbólica algún día se convertirá en real y el estado pagará por sus crímenes, queremos agradecer a toda la gente que asistió al acto, a todas las organizaciones que lo apoyaron y en particular a todas las personas que intervinieron dando voz a diferentes luchas, denuncias y reivindicaciones, especialmente al compañero de Askapena que viajó hasta Madrid para acompañarnos.

La lucha continúa, y la solidaridad también. Seguiremos en las próximas semanas denunciando el proceso contra Askapena y todos los juicios políticos contra el pueblo vasco, y en especial preparando la manifestación que recorrerá las calles de Madrid el próximo 31 de octubre.

Askapena aurrera!